El número 7 tiene el simbolismo más conocido de todos. Representa la perfección. También puede expresar la perfección del mal, o el sumo mal, como cuando Jesús enseña que si un espíritu inmundo sale de un hombre puede regresar con otros 7 espíritus peores, o cuando el evangelio cuenta que el Señor expulsó 7 demonios de la Magdalena. La tradición cristiana continuó este simbolismo del 7, y por eso fijó en 7 los sacramentos, los dones del Espíritu Santo, las virtudes.
En Semana Santa principalmente Jueves Santo desde tiempo inmemorial, los cristianos pasan esa noche recordando los sagrarios de las siete primeras parroquias de Roma, instituidas por San Cayo (286-293 d.C.), únicos lugares donde se reservaba al Santísimo, los fieles cristianos fueron haciendo tradición visitar en la noche del Jueves Santo, los altares monumentales, donde se reservan las hostias consagradas que servirán para comulgar en los oficios de Viernes Santo y para llevar el “Viático” a los enfermos, en 7 iglesias distintas. De España, especialmente Sevilla, pasó al Nuevo Continente, y en Guatemala cobra visos de una hermosa tradición.
Este día se celebran únicamente dos misas: Por la mañana y por la tarde, en la cual participan todos los sacerdotes recibiendo la comunión el clero con los fieles, debido a la suspensión de la celebración de las misas privadas, quedando en solemne repositorio el Santísimo Sacramento, colocado en la urna del Monumento o Sagrario adecuado y adornado decorosamente con velas y luces, conforme lo prescrito por la Sagrada Congregación de Ritos, expuesto a la adoración desde el fin de la misa, hasta la media noche, sino hasta los oficios de la Pasión, en que se consume. Posteriormente se procede a desnudar los altares, excepto aquel en que se adora al Santísimo.
Toda la majestuosa liturgia del día Jueves Santo, está dedicada a realzar el misterio eucarístico, mezclándose entre los creyentes los sentimientos de gozo y alegría por la permanencia eterna de Cristo en las Sagradas Especies y la honda tristeza por su pasión y muerte. De ahí que ese día se utilicen ornamentos blancos, suene el órgano en los templos y se toquen las campanas a Gloria, permaneciendo en silencio hasta que se produce la llamada que invita a la gran Vigilia Pascual.
Parroquia San Vicente de Paul
Santuario de la Virgen de Guadalupe
Parroquia Del Señor de las Misericordias
Capilla de la Virgen de la Medalla Milagrosa Casa Central
Capilla San Vicente de Paul
Iglesia Don Bosco
Iglesia Divina Providencia.